En conmemoración del Día Mundial del Ambiente, Hidroalto llevó a cabo una jornada integral de reforestación en la que se sembraron 400 árboles nativos, reforzando su compromiso con la sostenibilidad y la protección de la cuenca que abastece al proyecto hidroeléctrico. La especie seleccionada responde a las necesidades del ecosistema local, contribuyendo a la recuperación del bosque húmedo, la estabilidad del suelo y la conservación de la biodiversidad presente en la zona.
Colaboradores de todas las áreas participaron activamente en la siembra, convirtiendo la actividad en un ejercicio de responsabilidad ambiental compartida. Antes de iniciar, el equipo recibió una inducción sobre el valor de los bosques en la regulación hídrica, el control de erosión y la protección de las microcuencas que sostienen la operación del proyecto. Esta jornada no solo generó impacto ambiental directo, sino también una mayor comprensión del rol que cada persona cumple en la preservación del entorno.
Estas acciones se integran de forma estratégica a la política ambiental de Hidroalto, que prioriza la prevención, la conservación y el manejo responsable de los recursos naturales. Para la empresa, el entorno no es un elemento accesorio: es un activo clave que garantiza la sostenibilidad operativa y el bienestar de las comunidades aledañas. La siembra de estos 400 árboles reafirma la visión de Hidroalto: producir energía limpia mientras se protege y revitaliza el ambiente que lo hace posible.